Aletear entre las nubes

La gallina hace un movimiento brusco con la cabeza y camina por la habitación. Se desahoga con un cacareo excitado, nervioso. Picotea en el...

Las vecinas

Mariana ordena apurada los libros, la ropa, las botellas; limpia las cenizas dispersas sobre la mesa. Duda un instante antes de tirar esa tuca...

Sería bueno que la gente supiera

Tengo un amigo que me dijo que si yo quería y que si me animaba que podía tranquilamente ponerme a contar algo que se...
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Guerra a las hormigas

Creía haber limpiado todos los cadáveres, pero cada vez que volvía me encontraba con algunos aun esperándome con sus cientos de ojos muertos y...

Cómo Philip Marlowe consiguió un teléfono en Mar del Plata

Nuestro amigo ha repetido tantas veces la anécdota sobre cómo le consiguió un teléfono a Osvaldo Soriano, que hoy circulan por Mar del Plata...

Breve caso de Jorge Arévalo

El celular vibraba. Leyó quién era y atendió.    -Si, ¿qué pasa?    -Buenos días Arévalo, tengo un trabajito para vos, la policía no puede investigarlo -dijo escuetamente...

La luna es como los vampiros

Empieza a pedalear. Una pierna primero, después otra. Hace tanto tiempo que no practica ese movimiento sencillo y repetitivo que siente el cuerpo entumecido,...

Guillermito

IOlor a sangre había. Guillermito, con los ojos cerrados, con las manos en las orejas, con la frente contra el suelo, permaneció, luego de...

La noche tiene oídos

“El día tiene ojos, la noche tiene oídos” dice un proverbio popular. Yo así lo creo. Ya era muy tarde y tenía que terminar de corregir...

La balada del quinto

Habíamos quedado en que esta vez iba a poder aparecer, que no iba a volver a pasar lo de siempre. Pero nada de eso...

Tattersall

En el reducido, pero intrincado mundo hípico del Noreste del país, a Carry Carter lo precedía su reputación: jockey virtuoso, muy inteligente, venido a...

Rod Stewart

La vi una sola vez en mi vida. Yo tendría veinte. Ella parecía no tener edad. La sonrisa franca, los ojos chispeantes. Luminosa a...

Osvaldo Soriano en la luna de Entel

No pude bajarme del auto. Al principio, al menos. Miré hacia la casa. Miré todo lo que estaba desierto. Punta Mogotes sabe ser desolada...

Mokuzen o cómo estar dentro del silencio

Mokuzen o cómo estar dentro del silencio“Necesito silencio, estar sola y salir y disponer de una hora para pensar en lo que le ha...

Final de historia

Llego a casa. Es mediodía. Es la hora del almuerzo, pero no tengo hambre. Mi teléfono suena y me           ...